jueves, 10 de abril de 2008

La vida es una (falta de) moneda

De repente todos los noticieros de TV - con un sentido de la agudeza sorprendente - descubrieron que los chicos en las escuelas se encuentran a la salida y se matan a trompadas. ¡Qué novedad che! La verdad no tenía idea de que pasaban esas cosas. Falta que informen ahora que "crece la ola de alumnos que se copian en los examenes" o "preocupación por alumnos ¡y alumnas! que fuman en el baño" o "Empeora la situación de los alumnos burlados por sus compañeros por no saber jugar al fútbol" y vamos todos por el Pulitzer. La cara oscura de la educación argentina, revelada por fin.

¿Ya no garpan los abuelos asaltados en su propios departamentos, los jóvenes golpeados en discotecas, los ladrones motorizados que arrebatan carteras, los limpiavidrios violentos, los asaltos a autoservicios chinos, las discotecas que no cumplen con las normas de seguridad, los coches bomba en Irak, los inmigrantes marginados en Francia? ¿O será que todo eso dejó de pasar de repente? Los noticieros parecen grupos pop: no se pueden poner a informar de los hechos relevantes, nadie los vería, sino que necesitan periodícamente algún "hit" para cautivar a su audiencia. El lockout patronal fue maná del cielo y morfaron un par de semanas muy pero muy bien (aún límitandose a entrecruzar discursos sin informar una goma); ahora que se acabó, están en un grave aprieto para justificar su cada vez más triste existencia.

¡Che! ¿Qué tenemos? Nada ¿Cómo nada? ¡Necesitamos un nuevo hit! Bueno, no sé, a ver, qué tenemos acá... Uy mirá! Acá hay una abuela a la que molieron a patadas el otro día... ¡No loco, eso lo usamos hace poco! ¿Cuántas noticias de viejos te pensás que aguanta la gente? No sé, si se vienen dando panzazos de famosos bailando hace un buen rato, yo creo que están listos para otra ronda de abuelos martirizados. Nah, posta que a nadie le interesa más, nos pasamos un poco con esas noticias y ya nadie las toma en serio; necesitamos una verdadera innovación ¿Y si en vez de viejos usamos jóvenes? ¡Jóvenes cagándose a trompadas! ¿Jóvenes? Hum puede andar... ¡Sí, jóvenes en colegios que se agarran a trompadas! Bueno, dale, démosle con eso a ver qué onda.

¿Quieren un hit? Yo tengo uno: las monedas se están extinguiendo cual dodos en la argentina, y nadie dice nada. Ni siquiera Fontevecchia, que bien podría colgar de perfil.com un supertítulo onda "La Argentina K sin monedas; cómo el aparato de terror oficial opera día y noche para ocultar la verdad. Entérese de los nombres del escándalo". Sea como sea, no hay monedas.

En los subtes a cierta hora pagás el viaje con un billete de dos pesos y te dejan pasar gratis porque no tienen para devolverte. Claro, te piden por favor que colabores con cambio, hasta tienen colgada una grilla indicando que si vas a comprar tantos viajes pagues con tanto cambio y así. ¡Se imaginan! Hasta tienen una marquesina en las bocas de subte, rogando que "para viajar, por favor abonar con 90 centavos".

Resultado obvio: aún teniendo 90 centavos justo, vamos a pelar dos pesos o más. El boletero dirá (con cara de consternación) "pasá por la puerta porque no me quedan monedas" y listo, viaje gratis. Claro que nosotros acompañaremos esa consternación, no vaya a ser que alguien crea que estamos felices de poder viajar gratis; con toda la enorme inversión que está haciendo Metrovías para aumentar las frecuencias y mejorar la habitabilidad de las estaciones, la verdad da un poco de culpa acharcarles 90 centavos.

Pero lo gracioso de todo esto es: ¡Les faltan monedas y nos piden a nosotros que se las proveamos! O sea que no solo tenemos que pagar tarifas más caras para que les cierren los números, sino que además les tenemos que ¡¡¡Proveer monedas para que puedan cobrarnos!!!. ¡¡¡Y te lo piden por favor!!! Dale, no seas rata, usá tus moneditas, sé copado. Como si después no tuviéramos que andar haciendo malabares exóticos para poder pagar el colectivo que, como es de público conocimiento, solo acepta monedas (y ahí sí, ningún "pasá por la puerta").

A veces el tema no sale tan bien. Ayer me quería comprar algo para tomar en uno de los tantos maxi-kioskos que hay por la zona del macrocentro (Ayacucho y Santa Fe, para ser más exactos). Iba adquirir una Ser de naranja que salía dos con 50 (ni aclaro que me parece un afano cobarde). Pago, naturalmente, con cuatro pesos. No tengo monedas de 50 centavos para darte, me dicen. Está bien, dame dos de 25. Tampoco. El kiosquero como que se calienta (ven los billetes y casi que les viene el mundo abajo, te dicen "nooooooooo pibe"). Yo me caliento también (pienso: "sabés, metete el agua sabor naranja en el ojete"). La falta de monedas contribuye a la división entre los argentinos.

Historia real: el otro día salía para no sé dónde con un billete de cinco pesos. Pensaba: abono el boleto de tren a Barrancas de Belgrano que sale 85 centavos y al menos un peso con 15 centavos en monedas me van a devolver. Eso me soluciona el tema del bondi que tengo que tomar a continuación. Cuando llego a la boletería, está cerrada. Hay cartel aclaratorio. Lo leo. "La boletería está cerrada - dice - porque TBA no provee las monedas necesarias". Otro viaje gratis. En Belgrano ya ni controlan si tenés el boleto o no.

Ahora, los $5 los tengo igual, ahí quemándome el bolsillo. Cuando llego al Belgrano no tengo otra que kiosco. Me acerco a uno. Después de resolver arduos problemas matemáticos y saber exactamnte qué comprar para no gastar plata al pedo y que, al mismo tiempo, no me caguen devolviéndome puro billete de dos pesos, hago mi elección. Tres marroc. Ey, me das tres marroc. Voy agarrando mientras tanto, tres marroc. Extiendo billete verdoso de cinco pesos. Kiosquero pone cara de pánico. No tengo moneda chica para devolverte, me dice indignado. Naturalmente yo estoy hasta las pelotas. Le digo: moneda grande ¿tenés?, o sea, moneda de un peso ¿tenés?. Sí. Ok, entonces decime qué carajo sale un peso o dos pesos así me devolvés tres pesos y me aseguro una puta moneda de un peso. El nugatón te sale un peso, me dice. Perfecto. Dame dos nugatón. Ok. Finalmente obtengo la moneda y me voy en el 65 comiendo dos nugatón derretidos, hechos pomada.

Es algo raro ver la moneda finalmente en la mano extendida del kioskero o el boletero y percibir que te brillan los ojos, que se te alegra el espíritu. Es raro tener un puñadito de monedas en el bolsillo y sentirte poderoso, conquistador de un status; la degradante situación de tener que andar mangueando monedas ha sido superada.

La pregunta sigue: ¿Dónde están las monedas? ¿Desaparecen? ¿Las funden para hacer ceniceros? ¿Hay un brote epidémico de numismática? ¿Las acopian las empresas de transporte para vender? ¿Hay un mercado negro de monedas? ¿Se las están llevando los ricos para tirar en la Fontana Di Trevi? ¿Las están secuestrando los sojeros para hacer un lockout al monedero? ¿Las está robando un maniático que quiere poner todas las monedas del mundo sobre rieles y ver cómo el tren las aplasta? Imposible decir, pero si los noticieros quieren un "hit" de alto impacto, con esto están mucho más cubiertos que con las peleas en las escuelas que dentro de siete días ya no van a existir. Lo predigo: dentro de siete días los alumnos van a optar por el camino de la serenidad y no se van a seguir golpeando. Nunca más. Pero las monedas van a seguir faltando.

Y esto va terminar mal, acuérdense. Van a salir los kioskeros y los boleteros, con palos y la cara tapada, a repartir un poco. Cristina, hacé algo con las monedas y dejá de dividir al país.

13 comentarios:

Centrofovar dijo...

Mientras tanto, el encargado de Bush para la región califica de "excelentes" las relaciones bilaterales (?)

Matías dijo...

Un truco que a veces me resulta para conseguir monedas es ir a un locutorio. Agarro, llamo a cualquiera, hablo o me atiende el contestador. Una vez que hablás, no te pueden decir que no. Ya lo hice varias veces y funcionó a la perfección, aunque tuvieran un cartelito que dijera "las llamadas menos de tanto deben ser abonadas con monedas" y etc... Siempre podés decir: "Y bueno, pensé que iba a hablar más".

Además los kioskeros te tratan para el ojete cuando pelas un billete. Poco más que te insultan. Complicada la cosa. Buenos sería que las compañías de colectivos saquen esas maquinitas de mierda y le paguen a un sueldo a un tipo que esté en todos los móviles exclusivamente para cobrar el boleto. Pero ni en pedo contribuyen con trabajo si les cuesta más guita.

Muy buen post. Estuve leyendo unos viejos comentarios tuyos en lo de Niña Santa sobre Cristina. La verdad, Chapéau, me saco el sombrero.

Pat- dijo...

En los subtes a cierta hora pagás el viaje con un billete de dos pesos y te dejan pasar gratis porque no tienen para devolverte.

Tal cual. La cantidad de GUITA que estoy perdiendo en BOLUDECES para conseguir monedas no quiero ni calcularla. Todos los días voy al Farmacity, que tengo al lado del trabajo a ya no se qué comprar. Gasto más en giladas que en el viaje mismo, y no puedo ir al banco porque está abierto en MI horario laboral.

Nacho dijo...

Excelente post.

El especulativo diálogo entre los dos periodistas que buscaban de dónde sacar la próxima noticia me hizo recordar este otro excelente post que recomiendo:

http://fuckyoutiger.blogspot.com/2004/09/la-siempre-cambiante-cara-de-la.html

Y la pregunta sobre qué pasa con las monedas la respondo con este otro:

http://surfeandoavalanchas.blogspot.com/2007/12/no-quarter.html

Como adelanto puedo decir que efectivamente hay una mafia de colectiveros. Habría que cambiar las máquinas de los bondis por una "bondicard" y listo. La "cargás" con 10, 20, 50 o lo que sea de pesos y la maquinita te va descontando día a día con cada viaje.

GUISITO DE LENTEJAS dijo...

Cuano llego a Mar del Plata este verano y hago mi primer compra en una panadería, el total a pagar era con centavos, estaba aterrada, en mi mano derecha llevaba un pequeño monedero con escasas moneda, obviamente pago con un billete, esperando la cara de culo del panadero y pensando que le iba a decir para justificar mi falta de monedas, cuando oh! sorpresa, me da vuelto sin chistar y me llena la mano del vil metal, muchas de distintos tamaños, la boluda que hizo (o sea yo) pensé, aquí está la madre del borrego, las monedas viajan a los lugares turísticos para comodidad del usuario, Argentina año verde!!! pero luego cuando tomo un colectivo y pago con una tarjeta que previamente cargué en cualquier kiosco de la zona, me dije, seriamos tan felices en Capital y aledaños si se implementara el bondicard, ahí estaba el asunto, será muy difícil resolver uno de tantos problemas?
Quién los sabe?

Pat- dijo...

algunas lineas de colectivo de hecho tienen el servicio de la bondicard, es cuestión de investigar (?). Mar del Plata está mucho más adelantada en ese sentido. Cuando fui de vacaciones me llené el monedero de monedas :P total, se manejan con la tarjeta que cargan en Toledo, kioscos y locutorios, no se que hay que hacer para que acá también lo hagan :(

fedefer dijo...

Leí tu post nacho. Es muy interesante. Sabía que algo de eso pasaba, por eso lo sugiero en mi lista de posibles explicaciones. Creo que los trenes hacen lo mismo con lo que sacan de las máquinas expendedoras. Es una buena forma de entender no solo la escasez de monedas en general, sino que es una buena razón para que las empresas NO implementen un sistema de pago con tarjeta. Las monedas son un negocio.

Juan Ramón V. Mora dijo...

Chale, no sabía que estaba pasando algo así allá. Ni siquiera sabía que algo así podría pasar :S ojalá y mejore todo. Acá está pasando algo muy similar mediáticamente, pero en vez de peleas callejeras (que también las cubren), el tema de moda son los emo. Qué jodido.

As: Prime Time Of Your Live - Daft Punk.

Atte: Juan Ramón Velázquez Mora.

Anónimo dijo...

Una forma de conseguir monedas.
Se toman el tren a Tigre (si logran evitar todo el lío de sacar boleto, etc.), caminan hacia el casino, entran al casino, se acercan a la caja, cambian $100 en monedas de $0,25 (se supone que van a jugar al tragamonedas), se meten los tubitos de monedas en el bolsillo, salen del casino, se vuelven a sus casas.
Calculo que con otros casinos también funciona.
Saludos.
Ricardo.

Nacho dijo...

Lástima que me queda más cerca Chascomús que tigre me parece...

Mer Antoinette dijo...

Ay! hoy hice una cola de 30 min en el Galicia de mi barrio, porque por razones personales la depreno me permitió ir a laburar, y cuando me toca mi tan ansiado turno la cajera me pide el DNI!!!!!! EL DNI PARA CAMBIARME MONEDAS! lo pueden creer? Obvio que no lo tenía y obvio que la cajera tenía dos centímetros de sentido común (aunque dudo de ese concepto cada vez más) y me cambió 10 generosos pesos en monedas. A lo que voy es: el transporte público se ha transformado en algo super exclusivo, monedas only!!! y sólo los documentados somos dignos de tenerlas! SOY RE TOP, COIN! Pensar que antes, no le negábamos una moneda a un chico pobre que no tiene para comer. AAA nenito, ahora joda, que si no, no viajo.

fedefer dijo...

Ayer pagué un boleto de tren con un billete de 20 y me dieron todo el vuelto en billetes de 2. La caza de monedas acaba de comenzar. Cuidense, buitres.

SirThomas dijo...

Muy bueno el artículo. yo por suerte viajo casi nada en bondi, asi que no necesito, pero es un embole. Es más, yo voy contra la corriente (?), porque siempre que puedo pago con moneditas en los kioscos, por ejemplo. o se las cambio a quiene necesite en mi círculo de influencia.

Saludos.